Es malo cuando el periodismo se convierte en ideología.

                                        Existen periodistas buenos, regulares y 'los graciosillos'.

   Escuchaba hace unos días la emisora de radio Onda Cero en el programa de mañana dirigido por el buen periodista Carlos Herrera.

   A un cierto momento uno de sus colaboradores, con cuyas noticias contadas con gracejo el señor Herrera se descojona, habla con sorna del ex-presidente de Gobierno, don José Luís Rodríguez Zapatero, a propósito de que le han concedido la Medalla de Oro del Instituto Confucio de la Universidad de León.

   No le ha gustado a este periodista que el señor Zapatero haya recibido este galardón.

   Por cierto que, el cachondeo con que comenta este premio, me recordaba el jolgorio y risas con que recibían sus señorías del Partido Popular en el Congreso cuando su líder, señor Rajoy, se burlaba de la Alianza de Civilizaciones.

   Por cierto, que se ha tenido que tragar recientemente cuanto dijo de esta iniciativa de Zapatero con el Presidente de Turquía.

   Los méritos del señor Zapatero para recibir este galardón estriban en que durante su mandato difundió el intercambio cultural y económico entre España y China.

   La universidad leonesa se está distinguiendo por su trabajo en la difusión de la lengua y cultura chinas.

   En su discurso de aceptación del premio, Zapatero ensalzó a China como 'el país plural y segunda potencia del mundo'.

   Recordó, igualmente, que durante su gobierno mantuvo su compromiso de fortalecer los lazos entre España y China y definió al Instituto Confucio como 'un proyecto propio de un mundo global'.

   El embajador de China, que también recibió igual galardón, por su parte dijo que el Instituto es 'un punto y un símbolo de amistad', y alabó la labor del señor Zapatero en su esfuerzo por promocionar el intercambio cultural entre los dos países.

   Pues bien. A la vista de lo dicho, mi conclusión no puede ser otra que la que este periodista 'graciosillo', en su intento por ofender a don José Luís Rodríguez Zapatero, ha ofendido, de camino, al propio señor embajador de China en España y a la misma universidad castellana, promotora del galardón.