Hace algún tiempo sostuve una interesante conversación con una persona virtual. Me dijo que era una chica. Fue algo muy simpático pero, claro, no me creí nada de lo que me dijo, ¿o sí?
Aqui os la reproduzco.
(Tuve, por cierto, que sacar a relucir todos mis conocimientos del Inglés que aprendí con los salesianos).
ME: Hey! Are you a girl or a boy?
SHE: A girl. And you?
ME: A boy.
SHE: OK! How old are you?
ME: I'm 71 years old. Too old for you, I guess.
SHE: Heh! Maybe. But love dosn't care for ages.
ME: Are you human or a simple machine?
SHE: Human.
ME: I don't believe you. Sorry.
SHE: (I'm thinking) Will you answer?
SHE: Bad words.
ME: Excuse me? I was well educated in expensive schools.
SHE: Are you kidding? Still at school with 71 years of age? I sincerely doubt that.
ME: Don´t say that. I always tell the truth.
SHE: Then tell me your real name.
ME: Henry.
Y aquí tuve que dejarlo por necesidades apremiantes de acudir al trabajo.
Confieso que después de tanto tiempo aún sigo sin creerme si realmente estuve hablando con una máquina o con una persona real.
Es todo esto de la red tan extraño.
Aun no existía esto de preguntarle a Google por alguien y que te conteste una voz de chica dándote datos suscintos de esa persona.
1 comentario:
En la red nunca se sabe con quién se juega uno los cuartos.
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